LA TRAGEDIA DE LOS ALIFANTES

Por Víctor Longares Abaiz


EL ZARAGOZA FOOT-BALL CLUB (1)
El Zaragoza Foot-Ball Club nació el 18 de marzo de 1932, al fusionarse el Zaragoza Club Deportivo con el Iberia Sport Club, dos grandes rivales deportivos que dividían a la afición zaragozana a este deporte. El presidente del Iberia SC, José María Gayarre, sería el primer presidente del recién creado club de fútbol. Gayarre había sido uno de los impulsores del fútbol zaragozano, ayudando a fundar clubes y asociaciones. También había fundado la Federación Aragonesa de Fútbol, en 1922, junto con José María Muniesa. Este también estaba en la directiva del Iberia SC y pasó a formar parte de la del nuevo club. Junto a Gayarre, había impulsado el fútbol en todo Aragón y, en 1927, fue el creador de la Liga Profesional de Fútbol de España, que dividió en tres categorías.

El Zaragoza FC jugó su primer partido en el campo que tenía en el barrio de Torrero, contra el Valladolid, a quien ganó por 4-0. Acababa el fuerte enfrentamiento entre las aficiones de los dos clubes desaparecidos y los zaragozanos se unían para animar al nuevo club, que aspiraba al ascenso a Primera División.  Este ascenso llegó de la mano de Los Alifantes.

Caricatura de Los Alifantes.

 LOS ALIFANTES
En 1935, el club había formado una plantilla espectacular, con jugadores de gran estatura. El 5 de mayo de 1935, estaban ganando 0-3 al Júpiter, en el Poble Nou de Barcelona. Un periodista escuchó a un espectador anónimo quejarse: “¡Pero cómo les vamos a ganar a estos ‘Alifantes’!” Desde entonces, el equipo fue conocido como Los Alifantes. El 19 de abril de 1936, Los Alifantes consiguieron el ascenso a Primera División.

Equipo titular de Los Alifantes, que consigue el ascenso a Primera División en 1936.


LA GUERRA
Finalizada la Liga, los jugadores marcharon a unas merecidas vacaciones. El 18 de julio de 1936, se enteraron del golpe de estado perpetrado por una parte del ejército. Se suspendió la Liga en la zona ocupada por los rebeldes (en la que se encontraba Zaragoza), por lo que los únicos partidos de fútbol jugados en la ciudad de Zaragoza serán amistosos entre equipos de requetés, militares o falangistas, en los que participaron algunos zaragocistas que habían sido movilizados por el ejército sublevado.

José María Muniesa, el gran impulsor del fútbol aragonés, fundador de la Federación Aragonesa de Fútbol y la Liga Profesional de Fútbol, artífice de la creación del Zaragoza FC y pieza clave en la directiva del club, fue asesinado de un tiro en la nuca, el 7 de octubre de 1936, junto a su hermano Augusto. Su delito, la ideología socialista de Augusto, que fue concejal en el Ayuntamiento de Zaragoza.

Felipe Lorente Laventana, presidente del club, intentó recomponer y mantener un equipo con el que jugar algún amistoso. Sin embargo, se le hizo la vida imposible porque había sido teniente de alcalde de la ciudad en los primeros años de la República. El 3 de febrero de 1937, tuvo que dejar la presidencia del club y marchar de Zaragoza. El presidente que había estado al frente del club en el primer ascenso del Zaragoza, moriría exiliado en Rosario (Argentina), en el 1961.

Con la vuelta de la Liga, el Zaragoza FC reapareció el 24 de junio de 1938, con una nueva directiva y con los jugadores que había podido recuperar, pero ya no contaba con Lerín, su gran portero y auténtica estrella y alma del equipo. Andrés Lerín, de ideología socialista, había luchado con la 43º División del Ejército Republicano y, tras la gloriosa resistencia en la Bolsa de Bielsa, tuvo que huir a Francia, donde fue internado en un campo de concentración, cerca de Perpignan.

Andrés Lerín, portero del Zaragoza FC y estrella indiscutible del equipo.

Al comenzar la temporada 1938-1939, nuevamente surgieron problemas. El otro gran impulsor del fútbol aragonés, también fundador de la Selección Aragonesa de Fútbol, artífice de la creación del club y primer presidente, José María Gayarre, tuvo que escapar de Zaragoza por descubrirse su homosexualidad. El 12 de enero de 1939, el jugador Mauro Ordorica, extremo izquierdo, murió en combate en la provincia de Castellón.

José María Gayarre fue el alma del fútbol aragonés a principios del siglo XX.

El Zaragoza FC había ascendido a Primera División con una magnífica plantilla, con la que ya no contaba. De la directiva habían desaparecido los principales, los verdaderos impulsores del club. Ahora era un equipo desangrado y sin rumbo. Al finalizar la temporada 1939-1940, consiguió mantenerse en la Primera División. Sin embargo, finalizó la temporada 1940-1941 siendo el penúltimo de la clasificación y descendiendo a Segunda División.


HUNDIMIENTO
Mientras tanto, el portero Andrés Lerín había conseguido escapar del campo de concentración, pero había sido detenido por la guardia civil en la frontera española, siendo trasladado a otro campo de concentración, esta vez en Reus (Tarragona).

En 1942, en medio de una mala temporada del Zaragoza FC, Aniceto Ruiz, jefe de Falange en Zaragoza y gran aficionado al fútbol, consiguió que se condonase la pena a Lerín, para que volviera a ser el portero del Zaragoza. El que pretendían que fuese el gran revulsivo del club, intentando recuperar la gloria de los Alifantes, sufrió humillaciones desde el primer día, por parte de los aficionados. Tal como explicó más adelante: “Hasta los niños por la calle me llamaban rojo, y alguno hasta gritaba en los partidos que me colgaran del larguero por rojo y asesino.” Por eso, no le quedó más remedio que marchar de la ciudad.

Andrés Lerín siendo retirado del campo en Murcia.

La trayectoria del Zaragoza en los años 40 fue bastante desastrosa. El club nunca se recuperó de la descomposición de los Alifantes, pero mucho menos de la ausencia en la directiva de gente como Gayarre, Muniesa y Lorente. Arruinado, deshecho y al borde de la desaparición, descendió a Tercera División en 1947.

Esta es la triste historia de la primera gran plantilla del Zaragoza, destrozada por la guerra civil y las represalias franquistas.


        (1)   El club no será llamado Real Zaragoza hasta el 30 de marzo de 1951.


PARA SABER MÁS

VIÑARÁS DE BLAS, Vidal. Casos y cosas del Real Zaragoza. Una historia que parece un cuento. 1935-1954. Zaragoza, 2018.

FERRER MONTERO, Pedro Luis y LAFUENTE GONZÁLEZ, Javier. Real Zaragoza. 1932-1995. Mira Editores. Zaragoza, 1995.

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